sábado, 9 de septiembre de 2017

Un caracol escaleras arriba preguntando por ti

La banda sonora de nuestro verano ha sido sin duda el recopilatorio denominado "El disco de las primas", una selección musical realizada por la primita Inma, Lucía y la colaboración especial de Victoria. Ahora al final de verano han lanzado la segunda edición: "Los temazos de las primas", que incluye algunos temas del anterior con nuevas incorporaciones. Hemos escuchado el disco en el coche hasta la saciedad, sobre todo en nuestro viaje al Valle del Baztán (Navarra). 


Erratzu, el pueblo donde nos hospedamos en el Valle del Baztán

Recorrimos España de sur a norte y del norte a sur escuchando a Shakira (mucha Shakira), a Luis Fonsi, a Bisbal, a Ricky Martin y también a Queen, El mago de Oz... Sí, en el disco de las primas predominan canciones de moda, canciones para bailar y reguetonianas, pero también se han colado algunos clásicos de nuestras niñas como son We will rock you y We are the champions o La fiesta pagana, a la que ellas llaman "Ponte en pie". Esta última les gusta por la música, porque les parece una canción pirata, no por la letra, supongo, y espero que no se aprendan la letra y la canten en nuestro pueblo que es muy cofrade. La exposición excesiva a este disco provoca un efecto curioso: aborrecer estas tres últimas canciones que siempre me han gustado y , por otra parte, que otras canciones que no tolerabas mucho te vayan gustando, como, por ejemplo, Fiebre de David Bisbal. Oye que no está mal. Cuando podíamos, papá piofaurio y yo volvíamos a nuestra música y llegamos a echar de menos a los Cantajuegos. 

Esta banda sonora ha musicado un verano muy familiar, tranquilo, provechoso y también divertido. Hemos disfrutado mucho de las niñas y ellas de nosotros. Lo malo es que se va marchando y me parece que regresan mis momentos de mal genio e inseguridad, los desafíos de Lucía y el genio de Victoria. Bueno, el genio de Victoria nunca nos ha abandonado, aunque he de decir que durante las vacaciones ha estado mucho más tranquila, ha llorado y gritado menos. Rezo porque sea consecuencia de que está evolucionando y no va a haber regresión, que no haya sido solo fruto del relax vacacional.

En mi infancia era mi padre el que ponía la música y cantaba. Canta muy bien, de joven fue vocalista de un grupo de su barrio, Los Ondas. A veces me cantaba a mí y me moría de vergüenza, la de Qué cara más bonita tiene esta niña o la de José Luis Perales de Carta María de la que siempre me llamó mucho la atención lo de "un caracol escaleras arriba preguntando por ti"... Una vez una cucaracha subió las escaleras de mi casa para perseguirme (lo juro, dando saltos), pero si hubiese sido un caracol el que me buscaba, qué ilusión me habría hecho. 


 Había otras canciones y otros cantautores que me extrañaban, como la canción del poema de Neruda de Tu risa que versionaron Olga Manzano y Manuel Picón No sabía que era un poema de Neruda y de muy pequeña no sabía ni quien era Neruda, claro, pero esa canción me inquietaba. Porque hablaba con esas voces tan profundas y líricas de sangre, risa, espadas...La otra voz que me inquietaba era la de Leonardo Flavio. Algunas canciones eran un poquito alegres, pero la mayoría eran melancólicas, como Ella ya me olvidó o esta del pajarito, qué pena. Estas eran, y son, algunas de las canciones de mi padre, que escuchaba también mucho flamenco y ópera, cantando de ambos palos; por ejemplo, recuerdo el  Amapooolaaaa, lindísima amapoooolaaa

En fin, verano y música, se acaba lo bueno. La música siempre está. Y yo que he descubierto ahora Spotify (sí, voy a mi ritmo, tampoco he visto nada de Juego de tronos) estoy encantada escuchando mucha música y descubriendo. Algo muy bueno que tengo al hacerme mayor (además de que me hago tatuajes y piercings a la vejez) es que mi curiosidad y mis ganas de aprender crecen y crecen.